- Leer las posturas de los partidos y los candidatos para discernir cuál elegir NO SIRVE, porque son letra muerta. TODOS los partidos proponen y ofrecen cosas razonables mientras están en campaña (excepto los retrógradas del Verde con su pena de muerte), y una vez en el poder TODOS los diputados votan por iniciativas ofensivas. Recuerden la Ley Televisa, por favor, votada sin abstenciones ni votos en contra, en 7 minutos. Los políticos son expertos en el cinismo y la simulación, en el decir que quieren que "se aplique todo el peso de la ley" mientras la ignoran diariamente. Por tanto, si las plataformas de los partidos no se traducen en hechos reales, ¿por qué votar por esos partidos?
- Como dicen Denise Dresser, votar por el "menos malo" es poner la medida de calidad en el suelo. Lo peor del asunto es que los partidos están eligiendo como candidatos a gente que, efectivamente, ni siquiera trata de rebasar esa medida. Tenemos, primero que nada, a toda la parentela de los dirigentes como plurinominales. Aparte, están las personas que no tienen NADA que ver con la política (PRD... en serio? Ana Guevara? Hasta se tiene que promocionar como "... y su grupo de expertos" para tener ALGO de credibilidad. Y miren que me cae MUY bien. Otra... Guadalupe Loaeza como perredista???). Además, tenemos el asunto de que los políticos cambian de partido como de calzones, y el que hoy es candidato del PRD ayer fue panista y antier fue priísta. Es obvio que la ideología, los valores y la historia valen sombrilla, la cosa es estar dentro del presupuesto.
- El voto nulo cuenta como parte del total en base al cuál se calcula el porcentaje de votos que cada partido obtuvo, de modo que si es lo suficientemente numeroso, podría llegar a quitar el registro a una de las lacras de nuestro sistema político: los partidos balines. Y eso, sin tener que regalar nuestro voto a un candidato que NO nos convence, que pertenezca a uno de los partidos con "voto duro", como PRI o PAN. Para mí, este es el objetivo más importante, y que hace que valga la pena hacerlo. Ya me han dicho que con eso se afianza el poder de los partidos mayoritarios, los acarreadores, pero pues yo lo único que veo es que ESTÁN TOTALMENTE AFIANZADOS, de modo que para UNA elección no hace gran diferencia para ellos. Sin embargo, si logramos deshacernos de uno o dos partidos menores, podríamos tener una siguiente elección con menos millones de pesos tirados a la basura, gastados en partidos que se manejan como mafias.
- La campaña del voto nulo ha logrado que MUCHA GENTE hable sobre las campañas, sobre las inequidades, sobre las carencias y ha hecho que muchas personas que votaban por inercia ahora lo hagan de una forma más consciente. Tal vez igual acaben votando por el PRI o el PRD, pero al menos no lo hacen por costumbre, sino tras una evaluación más razonada. ESO ya es una ganancia. Adicionalmente, ha generado una ola de opiniones que podrían reducir el abstencionismo (y la abulia, podría decir) que caracteriza a las elecciones intermedias. Si los que hacen activismo por el voto nulo, es decir, nosotros, logramos organizarnos y pasadas las elecciones dar seguimiento a NUESTRO LEGÍTIMO INTERÉS de que los políticos nos representen A NOSOTROS, NO A LOS PARTIDOS, no es descabellado pensar que se puedan lograr cambios a futuro como la reducción de gasto ridículo en los partidos y sus burocracias, aumentar la transparencia financiera de los partidos, crear sistemas REALES de responsabilidad y rendición de cuentas por parte de funcionarios públicos, reelección en el poder legislativo y presidencias municipales, y tantas otras demandas. ESTO puede ser la base para una organización de la sociedad más allá de presentarse a votar y olvidarse del asunto.
Cuáles son TUS razones para votar, o para anular?